Ya sabes que desde que el mundo es mundo los humanos queremos dejar una marca. Necesitamos escribir, tomar notas, sacar cuentas, firmar...
La primera herramienta, similar a una pluma fuente, fue una pluma estilográfica, que no era más que una pluma de ave tallada de la manera adecuada (diagonal), dejando el cartílago en punta. Esa pluma se untaba en cualquier líquido pigmentado para luego hacer los trazados sobre tela, papiro o papel.
Como era de esperar, los tres protagonistas de la escritura se fueron perfeccionando. La tinta por su lado, el papel por el suyo y sin lugar a dudas, la pluma, que ha llegado a niveles insospechados de innovación y diseño.
La pluma estilográfica se relaciona con la escritura y por eso muchas personas pensamos que era el instrumento por excelencia del poeta o del escritor, pero la realidad, es que las caligrafías más bellas fueron creadas para llevar la contabilidad de las empresas! 🤔.
¿Han visto libros de contabilidad antiguos? son increíbles!... Bueno, para lograr esas letras, era necesario contar con puntas estilográficas y esas puntas se instalan en un palillero (pluma estilográfica), eso se unta en tinta china o tinta india y listas para escribir las cuentas más tristes esta noche ... jejeje.
El tema con esas plumas estilográficas, es que no eran transportables, es decir, para poder disfrutar de su utilidad, había que tener un espacio adecuado, para apoyar el papel y tener un pote de tinta a mano... Se imaginan lo que es eso? seguro que si. Eso de ir caminando y de repente tener una idea, sacar la libreta ...¿Y anotarla? no, no, no.
Para esas situaciones la pluma estilográfica fue evolucionando hacia la pluma fuente. El objetivo era lograr diseñar una pluma estilográfica que tuviera la “fuente” de alimentación en el mismo barril de la pluma De ahí su nombre: Pluma fuente. Para llegar a la pluma que ustedes conocen, pasamos por diferentes sistemas de alimentación que van desde un eye dropper precario hasta los más sofisticados vacumáticos pasando por infalibles sistemas de émbolo hasta llegar a la comodidad de la cultura desechable y así volver a repetir el ciclo.
Estilográfica: viene de la palabra estilografía que está formada con raíces griegas y significa "escritura con una pluma de punta metálica que escribe con la tinta contenida en su mango hueco".
Para escribir con las plumas de ave el primer paso era cortar su punta en diagonal para formar la extremidad con la que escribir. Este corte, al mismo tiempo, dejaba a la vista la estructura tubular hueca - el cálamo- que las plumas tienen en el centro.
Como el sistema de alimentación en una plumilla estilográfica es externa, no necesita un alimentador y por lo tanto la tinta no necesita tener cualidades especiales para que no se tape.
Las plumas estilográficas utilizan un tipo de tinta diferente a la tinta que usan las plumas fuente. Las estilográficas no necesitan alimentadores para llevar la tinta desde el estanque hasta la punta, por eso son tintas que tienen pigmentos grandes y son tintas con características de secado rápido. Incluso muchas veces la tinta para estilográficas requieren de un espesante para que entregue su mejor versión.
La pluma fuente en cambio necesita de una fluidez especial porque esa tinta debe pasar por canales microscópicos. Para eso las empresas han tenido que desarrollar pigmentos muy pequeños o añadir pócimas especiales para que la tinta no se seque en los canales de alimentación o en las aletas del alimentador.
Por eso primero es importante saber que una pluma fuente no es lo mismo que una pluma estilográfica y segundo, cuando compres tinta para tu pluma fuente, asegúrate de que el frasco diga “tinta para pluma fuente” 😉.
Si no estás seguro o segura que la tinta que estas metiendo al carro es compatible con tu pluma, entonces, escríbenos al whatsapp y asesórate, comprar la tinta equivocada le quita años de vida a las plumas!
Cada pluma trae una garantía limitada de fábrica. En general esa garantía está supeditada a que se utilice la tinta de la misma marca. Pero muchas personas compran plumas justamente por tu versatilidad en la posibilidad de usar tintas de diferentes colores y marcas, las empresas usan criterio y no pagan estudios para confirmar que no pasó tinta de otra marca por su alimentador.
Pero si hay que tener cuidado cuando usamos tintas de otras marcas, cuando su composición puede dañar el alimentador. Por ejemplo, los brillos se logran a través de pigmentos más grandes que lo normal, de hecho son visibles al ojo humano. Y también hay colores específicos que son más difíciles de lograr, como por ejemplo los rojos brillantes o los negros muy intensos. Se han fijado que la mayoría de los negros son más bien color pizarra?...
Hay algunos errores que son insalvables, como por ejemplo, usar tinta china o tinta india. Si haces eso, lo más probable es que pierdas la pluma o tengas que comprar plumín nuevo (que es casi como cambiar la pluma completa) y por supuesto que ese error no está cubierto por las garantías de fábrica, por eso son errores muy caros!
Una mala tinta puede tapar tu pluma, pero si es tinta para pluma fuente, puedes “resetear” tu pluma con un buen lavado.
Te invitamos a revisar nuestro canal de YouTube donde encontrarás consejos y tutoriales para mantener sana y salva tu pluma!
Por otro lado, cada vez que uses tu pluma estilográfica, también debes ocuparte de dejar las plumillas limpias y secas para mantenerlas lejos del óxido y que los pigmentos no intervengan el grosor original del trazo.
Muchas gracias por llegar al final de este artículo, esperamos que te haya servido para aprender un poco más sobre las plumas fuente que son nuestra pasión. Déjanos tus comentarios e inquietudes para inspirarnos en un futuro artículo ;-)
